23 julio 2009

El falo, madre fálica, el fetichismo y la spaltung

Reseña de la clase del 13 de Junio del CID-Tucumán, dictada por Silvia Elena Tendlarz.

La docente de Buenos Aires inició la clase delimitando cómo trabajan el concepto de falo Freud, Lacan y Miller. Así, explicitó: “existe una antinomia fundamental en Freud, lo dice Lacan… una antinomia interna a la asunción del hombre de su sexo”, “el sujeto, para asumir su sexo tiene que privarse de él”, “la salida de esta antinomia es el concepto de falo”.
Luego Tendlarz explica que el falo es tanto una solución como un problema, ya que no tiene referente. Existiría una falta de referente del falo o bien el único referente sería la significación, la significación de falo como pene por ejemplo, idea recurrente en la obra freudiana. Aquí se detiene para comentar dos textos de Freud que nos guían en este sentido, “Tres ensayos de una teoría sexual”, donde el concepto de pene es simbólico (pene=falo), y luego “La organización sexual infantil”, de 1923, el falo como símbolo se constituiría en este texto. Aquí Freud aclara que el primado no es genital sino del falo. Existiría un universal fálico “todos lo tienen” ante lo cual surge la gran desilusión de que “la madre no lo tiene”. Es decir, el falo es un símbolo que crea la falta mediante el complejo de castración. Frente al universal fálico estaría la castración de la madre. Castración que en la obra freudiana está asociada siempre a la pérdida del órgano masculino que resignificaría anteriores pérdidas como el destete por ejemplo.
A partir de aquí la docente inicia el tema del día, aclarando “Freud tenía razón: el falo sería un semblante universal” presente en diversas culturas y frente a eso el axioma de simbolización de lo singular sería el a.
Tendlarz explica que como muchos otros conceptos, en Lacan, el falo toma resonancias distintas según el momento de su obra. Así:
1º momento. Falo imaginario φ: del seminario 1 al 4 (período llamado por Miller “la imaginarización del goce”). Existe en este período un predominio de lo imaginario. Lacan trabaja por estas épocas con el estadio del espejo. Falo imaginario, imagen fálica con la cual el niño se identifica. En el seminario 4 sería donde Lacan introduce algo diferente diciendo que la madre y el niño nunca están a solas, siempre está entre ellos, el falo. A esto Miller llama la prevalencia del falo metonímico, a partir de lo cual Lacan inicia el viraje durante ese mismo año hacia la siguiente conceptualización de falo:
2º momento. Falo como significante del deseo -φ (negativización del falo).
3º momento. Predominio de lo real, falo como significante del goce φ. Seminarios 10 y 11. Para Tendlarz esto es esencial ya que el falo puede volverse así un significante universal transcultural. Nunca se trata del goce real como tal sino a través de sus semblantes, ficciones. Solo a través de lo universal se puede tomar algo de lo particular.
4º momento. a. El falo no desaparece pero cuando aparece a se considera al falo como semblante, un S1.
5º momento. Goce fálico = goce suplementario.
6º momento. Función fálica y teorías de la sexuación.

Silvia Tendlarz aclara que se centrará en el 2º momento, el falo como significante del deseo.
Así explica que el estadio del espejo tiene que ver con la imagen fálica sin el Edipo. Hay un falo metonímico que se ubica del lado de lo imaginario y un falo metafórico del lado de lo simbólico.
En la “Cuestión preliminar…” Lacan asocia el falo al Edipo y en “La significación del falo” tenemos cómo se puede construir una significación del falo sin Edipo. Esto, según explica la docente, es muy importante ya que cuando Lacan asocia al falo con el Edipo esta asociándolo con el padre. Padre que vectoriza la estructura psíquica. Siendo en estos tiempos el Nombre del Padre un elemento fundamental de la estructura psíquica, y precisamente es en este momento de la teoría mientras se habla de padre simbólico, padre muerto, Nombre del Padre, cuando Lacan hace un intento en “La significación del falo” que antecede lo que luego será… un más allá del padre.
Así el Nombre del Padre es un significante que permite acotar, poniendo una barra sobre el deseo materno dando lugar a la significación fálica. Por eso en “La significación del falo”, Lacan plantea que el falo es un significante imaginario, con lo cual marca la vacilación de que por un lado el falo está en la imagen y por otro en lo simbólico. Y el complejo de castración tiene una función de nudo en tanto permite al sujeto asumir su posición en relación a su sexo y la posición frente a su partenaire.
En relación a esto la docente aclara que para Lacan el falo se esclarece por su función, no es una fantasía (es decir que no es imaginario, como había dicho él mismo), no es un órgano, tampoco es un objeto sino su símbolo que hace perder al referente.
Con esto Tendlarz resume tres cosas sobre el falo:
• Es simulacro, insignia, no es el órgano sino que éste aparece velado por el falo.
• Objeto sustitutivo, función de sustitución.
• Asociado a la vida, turgencia y empuje (turgencia-detumescencia).

Es decir, el falo es un imaginario donde se pone en juego la turgencia-detumescencia, es un velo significante. Por la inscripción del falo se inicia el deseo.
Tendlarz aquí se detiene a explicar 4 términos utilizados por Lacan en “La significación del falo”. Cada término está asociado a una función específica que Lacan escribe en alemán.
1. Significable. Verdrängung (represión)
2. Significante. Aufhebung (supresión)
3. Significado. Erniedrigung (degradación)
4. Sujeto. Spaltung (división subjetiva)

Entonces, existiría primero lo significable, donde opera el significante. Esto significable adolece de latencia. Está ahí presente y puede volverse significante. En tanto significable, desaparece cuando se forma el significante. Aquí el ejemplo sería en Robinson Crusoe, la huella de Viernes, huella que se vuelve significante en tanto desaparece, por acción de la aufhebung. Así cada vez que surge un significante, un significable se borra.
Silvia Tendlarz se detiene a explicar una frase de Miller “el falo lacaniano nace del lado de la mujer y entre el fetichismo y la fobia”.
Luego de referirse a esta frase y explicar tanto la fobia como el fetichismo, se da lugar a las preguntas, de donde surge la cuestión del ser y el tener a partir de lo cual Silvia Tendlarz explica lo que para Lacan es la comedia de la relación entre los sexos. Explicando lo que desde cada sexo se pone en juego en relación al ser o tener el falo.

Luego de esto se pasa a un receso y a la vuelta Ricardo Gandolfo realiza la disciplina del comentario, en torno a un pasaje de “La significación del falo” (1958) de Jacques Lacan. Luego Jorge Haurigot Posse comenta un caso sobre el cual Silvia Tendlarz hace un análisis basado en la temática de la fecha.

Julieta Moré